1. Actualizaciones regulares del sistema operativo: Mantén tu sistema operativo actualizado con las últimas actualizaciones de seguridad. Los fabricantes lanzan parches de seguridad periódicamente para abordar vulnerabilidades conocidas, por lo que es importante instalar estas actualizaciones tan pronto como estén disponibles.

2. Instala un buen software antivirus y antimalware: Utiliza un software antivirus confiable y antimalware para proteger tu sistema contra amenazas conocidas y emergentes. Asegúrate de mantenerlo actualizado y realizar análisis periódicos para detectar y eliminar cualquier software malicioso.    .

3. Utiliza contraseñas seguras y cambialas regularmente: Utiliza contraseñas fuertes y únicas para tus cuentas y cambialas regularmente. Evita usar la misma contraseña para múltiples cuentas y considera el uso de un administrador de contraseñas para gestionar de manera segura tus credenciales.

4. Habilita el firewall: Asegúrate de que el firewall de tu sistema esté habilitado para filtrar el tráfico no deseado y proteger tu red contra intrusiones externas. Configura correctamente las reglas del firewall para permitir el tráfico necesario y bloquear el resto.

5. Sé cauteloso con los enlaces y archivos adjuntos: Ten cuidado al hacer clic en enlaces o abrir archivos adjuntos en correos electrónicos o mensajes de texto, especialmente si provienen de fuentes desconocidas o sospechosas. Estos pueden contener malware o dirigirte a sitios web maliciosos diseñados para robar información personal o financiera.